Hoy os traigo una mermelada de frutos rojos sin azúcar y que está buenísima!
Seguro que muchos estáis cansados de rebuscar por las estanterías de las mermeladas en los supermercados buscando alguna mermelada «nueva» sin azúcar y que realmente nos sorprenda, es decir que no lleve fructosa ni sucralosa ni nada que termine en «osa»…, hace poco me sorprendió y para mal una conocida marca de mermeladas que tenía un nuevo formato, una gran etiqueta traía sin azúcar, solo con «azúcar de la fruta» vamos que aquella etiqueta olía a fructosa un montón!
Ésta receta es además super fácil de hacer, yo la meto en la nevera y me dura perfectamente durante 15 días, aunque también la podéis tener unos días más haciendo un vacío, para ello hay que hervir el recipiente de cristal y una vez echada la mermelada dentro, lo cierras bien y le das la vuelta al bote y lo dejas así boca abajo al menos durante 12 horas.
En mi caso suelo hacer para un solo bote, así es que no le hago vacío y lo dejo en la nevera sin más para ir comiendo durante los siguientes 15 días, pensar que una tarrina de fresas o frutos rojos que venden en el mercado de unos 250gr ya te da para un bote.
RECETA:
-250 gr de fresas (podéis utilizar arándanos, moras o incluso otras frutas como el kiwi, manzana, etc..)
-1 cucharada de estevia en hojas molidas (podéis utilizar otro edulcorante apto que utilicéis).
-1 cucharadita de canela de ceylan en polvo.
-1 cucharada colmada de semillas de chía.
-4 cucharadas de agua.
*Nota: para quienes tienen candidiasis o están en algún tratamiento en fase inicial o protocolo antiflamatorio intestinal, pueden utilizar arándonos u otros frutos rojos que puedan tomar.
PREPARACIÓN:
Poner las fresas en un cazo al fuego medio-alto, añadir el agua y dejar hervir, la fruta irá soltando su propio jugo por eso no añadimos más cantidad de agua que 3 o 4 cucharadas. Cuando empieza a hervir, bajamos a fuego medio, añadimos la canela y vamos removiendo poco a poco, de vez en cuando para que no pegue durante 5 minutos, añadimos transcurrido ese tiempo la estevia en polvo molida, seguimos removiendo otros 5 minutos a la vez que vamos aplastando la fruta mientras removemos y además irá absorviendo agua. En total al fuego la dejamos 15 minutos. Pasados esos 15 minutos tenéis dos opciones dejarla como ésta con grumitos de fresa (a mí me gusta así) o pasar por la batidora, luego aún caliente se añaden las semillas de chía y se remueve bien, se deja reposar y atemperar y luego se mete a la nevera. Al cabo de unas horas veréis que la chía le ha dado una textura de auténtica mermelada!
Y ya podéis disfrutar de vuestra propia mermelada saludable de vuestra forma habitual, para echar al yogur, tostadas, tortitas, etc..